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Ligerita cuando tiene que serlo y seria cuando la situación lo amerita, la película nos cuenta la historia de Cal (Steve Carell), un padre de familia que pasa por el peor momento de su matrimonio, cuando se entera de que su mujer la engañó con otro. A pasos de la depresión conoce a Jacob (Ryan Gosling), un metrosexual que se las sabe por libro, y que lo ayudará en esta difícil situación, mostrándole una vida que Cal, quien se casó con su novia del instituto, nunca vivió; Jacob es todo lo que él nunca fue.
El tema centra trata de la búsqueda del verdadero amor, de las almas gemelas y de amores no correspondidos. Tiene de todo, además de unos giros muy choros que le dan a la historia ese algo que no sabíamos que faltaba pero que agradecemos cuando lo vemos.
Es bonita y te saca risas. Una historia la perseverancia en las relaciones amorosas, sobre pelear por lo que uno quiere y sobre no decepcionar a quienes creen en ti. Es de esas películas que trata de reivindicar el poder del amor. Está llena de clichés que funcionan, además de varias frases que hacen alusión a grandes películas.
Trailer
Buen reparto de actores.
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